Ojalá la vida te lleve a encontrar a alguien que, por fin, se merezca todo ese amor que tienes dentro. Ojalá sea así. No más lágrimas suicidas de esas que se matan por cualquier idiota que no supo valorar lo mucho que vales. No más días de irte a dormir pensando qué puedes cambiar en ti para gustarle a otros.
No hay nada que cambiar. Eres increíble y no te enteras. Te dejas engañar por todos esos que no quieren que seas feliz. Olvídate de ellos. Deja que hablen, que piensen lo que quieran. Sé feliz a tu manera y que nunca más nadie te haga sentir que no vales la pena.
Ojalá aprendas a quererte tú tanto como esperas que te quieran otros. No necesitas de nadie más que de ti mismo para ser feliz. Ya llegará alguien que te llene y complemente, alguien que te valore y te ame como mereces. Pero nunca mientras sigas dejando que entre cualquier idiota en tu corazón.
Protégete de tus malas decisiones, de tu falsa soledad. Eres mucho mejor de lo que piensas. Acepta todas tus rarezas y enamórate de ti. Ya habrá tiempo después para encontrar a esa persona que, estoy seguro, llegará en el momento perfecto y nunca antes.
Vivimos demasiado pendientes de los demás y, a veces, nos olvidamos de nosotros mismos. Sobre todo en lo que al amor se refiere. Tanto queremos gustarle a otros que llega un punto en que somos demasiado críticos con nuestra realidad. Y te olvidas de todo lo bueno que tiene ser quien eres buscando una falsa perfección que nunca alcanzas.
Déjate de todas esas tonterías, aléjate de todo aquel que no te quiera así, tal y como eres. Y quiérete, siempre, un poquito más de lo que quieras que te quieran otros.
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